Odio la oscuridad. Y él como si nada. Míralo, ahí durmiendo, tan a su bola, y yo desatendido. ¡Será desconsiderado! ¿Qué tengo que hacer para que me haga caso?
A ver el mail. Algo habrá entrado.
«El banco Lunaticotrérrico arroja un dividendo a su favor».
Nada. Necesito algo más potente. Su sueño es profundo. Además, está muy oscuro. Odio la oscuridad... y sus ronquidos. ¿Cómo puede una persona hacer semejante ruido? Y más delante de mí. Su amo. Esto no va a quedar así... ¿ayer hubo fútbol? ¡Qué tontería! Todos los días hay fútbol. A ver... Nada.... Solo de segunda. Tampoco le gusta tanto. Y esa manera de roncar demanda algo más fuerte. Algo como... ¡Sí! Esto es lo que buscaba. Ya verás;ahora solo falta hacer sonar mi pitidito especial, encender mi luz y... ¡Sí! ¡No hay sueño que pueda conmigo!
Bosteza, buena señal. Me agarra, perfecto. ¡Qué frías tiene las manos! Aunque su dedito deslizándose por mi barriga es cálido. Ahí lo tienes, imbécil.
«Nuevas imágenes de la Duquesa de Ô en cueros junto a su amante. Se rumorea que el Duque se pasa el día llorando».
Venga, ahora continúa leyendo. ¡No! ¿Te frotas los ojos? ¿No te gusta la noticia? ¡¿Qué?! ¿Me dejas en la mesilla? No pretenderás continuar durmiendo. Solo quiero un poco de atención. ¡Es tanto pedir!
Que sí, que me deja...
Vale, chaval, no me dejas opción. Y me da igual que sea domingo de madrugada. Te lo ganaste: ¡abriendo carpeta de las Fake News!
¡Vaya! Tenemos un antagonista que es un mando a distancia, y ahora nos traes a un móvil con muy malas intenciones. Muy original, me despistaste al principio.
ResponderEliminarJa, ja, ja. Sí, el mando a distancia no tiene nada que hacer contra un móvil, je, je.
EliminarUn abrazo!
No, si ya se veía venir. Los móviles serán nuestros próximos enemigos vengadores. Quizá deberíamos deshacernos de ellos antes de que empiecen a volvernos locos o paranoicos.
ResponderEliminarMuy buen micro, Pepe.
Un abrazo.
Ya lo son, el otro día para entrar en el Sepe me pedían el número de móvil, 😱, creo que ya nos tienen dominados, pero desde la zona silenciosa.
EliminarUn abrazo, Josep!
Jola, Pepe. Mientras leía, yo también tenía pensamientos ¿Qué será será? me preguntaba. ¿El perro, un libro? Pues, no y eso es lo que me da miedo porque estos aparatos del diablo no solo oyen sino que escuchan tus pensamientos o te fuerzan a ellos. No sé. Como siempre magnífico micro con un enemigo que, de momento, gana por goleada. Un abrazo.
ResponderEliminarSi te pones a pensar, da algo de miedo hasta qué punto estamos metidos en este mundillo. No solo nos escuchan sino que hacen un estudio estadístico de nuestros gustos, de los artículos que nos llaman la atención incluso el tiempo que dedicamos a las entradas de las redes sociales... Pues eso, que da miedo.
EliminarUn abrazo, Isan.
¡Hola, Pepe! Muchas gracias por participar en el microrreto. Plantear el móvil, no solo como villano, sino como un "amo" es una buena crítica a cómo se han instalado estos adictivos dispositivos en nuestras vidas. Además, al final recurre a uno de los mayores problemas que tenemos en la actualidad con las noticias: las Fake News que están inundando la red. Un relato divertido y que invita a la reflexión.
ResponderEliminarUn abrazo :)
El otro día leí que seis de cada siete noticias son fakes news. Eso da qué pensar hacia dónde vamos.
EliminarMuchas gracias M.A. y felicitaciones por la gran acogida que está teniendo este reto.
Un abrazo!
Hola Pepe, estupendo micro. Yo también pasé por el estado de intriga que nos obliga a leer hasta el final casi sin respirar. Tienes toda la razón y es una excelente advertencia aunque no sé si la humanidad está aún a tiempo. Un abrazo
ResponderEliminarAy, Juana, más vale pensar que aún estamos a tiempo, aunque este es cada vez más alarmantemente escaso.
EliminarGracias por pasar y un abrazo!
El móvil se ha convertido en un supervillano silencioso! Desgraciadamente aun hay mucha gente que no se ha dado cuenta, y los que lo sabemos, efectivamente ya pensamos que es demasiado tarde! Ja, ja! Un abrazo!
ResponderEliminarJa, ja, ja. Dentro de unos años tendremos que liderar una ofensiva contra los moviles. Será fácil. Su infantería tendrá el cerebro seco, je, je.
EliminarUn abrazo, Marifelita
Muy buen micro, realmente los móviles se están transformando en villanos, pues se apoderando de la atención de la gente a tal punto que ni en la mesa familiar hay diálogo, realmente bien pensado.
ResponderEliminarSaludos, PATRICIA F.
Esas situaciones cada vez son más cotidianas, ves grupos de gente que no de habla absorta en sus móviles. Lo más curioso es que puede que estén hablando entre ellos a través de sus móviles aún estando codo con codo, porque ese telón digital cada vez proporciona mayor confort, aunque la gente con la que hables sea con la que mejor te lleves.
EliminarUn abrazo, Patricia
Vaya, vaya, tuve que leer el final un par de veces para captar quién era el amo. Nos pintas una máquina terrible. Aún más de lo que ya es...
ResponderEliminar¡Buen trabajo!
Ja, ja, ja. De eso se trata, aunque debe de ser más terrible, MJ.
EliminarGracias por pasar, y un abrazo!
Muy bueno, sin duda los móviles hoy pueden ser unos verdaderos villanos, invitándonos a dejar fuera a los demás y metiéndonos en una burbuja. Claro que al final, los malos no son ellos, simples instrumentos, sino nosotros que no sabemos poner límites. Muy buen relato, muy actual.
ResponderEliminarEso es, el malo es uno mismo, pero es más fácil culpar al otro, aunque sea una extensión de ti mismo.
EliminarUn fuerte abrazo, Ana.
Hola Pepe, juegas al despiste con tu protagonista, pensé que era un libro y resulta que es un móvil el malo de la película .
ResponderEliminarUn tema muy de actualidad
Un abrazo
Puri
Pues no pensé que despistara tanto. Puede que yo esté más enganchado que la mayoría, je, je.
EliminarUn abrazo, Puri
Nos manejas de un lado s otro, sospechando si puede ser uno u otro, hasta que saca su arma definitiva. Bien traído lo del "amo" y lo de la pantalla oscura, que representa el descanso de un objeto que representa la ansiedad en estado puro.
ResponderEliminarAbrazoo
La ansiedad en estado puro, sí señor, esa descripción es perfecta, sobre todo, cuando lo perdemos de vista y queremos ver lo que acabamos de ver hace cinco minutos.
EliminarUn abrazo, Gabiliante
Un micro cargado de crítica e ironía. Me ha encantado, Pepe, muy original y muy sorprendente ese final.
ResponderEliminarMuchas gracias, Marta, ante la tiranía del móvil, ironía, ja, ja.
EliminarUn abrazo!
Hola, Pepe:
ResponderEliminarSorprendido, como cuando dejo el teléfono encendido en algún lugar prohibido, así me ha dejado el relato que has compartido.
Un abrazo, Pepe.
Pues muchas gracias, Nino, y cuidado con dejarse el movil encendido, que los carga el diablo.
EliminarUn abrazo!
Hola Pepe joe con el móvil tiene muy mala leche y soluciones para llamar la atención. Buen relato. Un abrazo.
ResponderEliminarYa ves, nunca se cansá, je, je.
EliminarUn abrazo, Ainhoa.
Vaya con este villano. Lo malo es que se actualiza solo el muy jodido y sabe lo que nos gusta tocarle la pantallita. Toda una debilidad del ser humano de este siglo tan sometido a las tecnologías.
ResponderEliminarAbrazo.
Esa es otra, que se actualiza solo, dentro de poco él nos actualizará a nosotros.
EliminarMuchas gracias por pasar, Francisco.
Un abrazo
Muy buen micro, Pepe, tu historia invita a la reflexión de quién conoce mejor a quien: el “amo” el “tecnosiervo” o el “usuario”. Al principio dude sobre qué personaje representaba al antagonista pero el desarrollo del relato dejó bien a las claras las malas intenciones del “aparato inteligente”. Me ha gustado el micro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un aparatejo que vino como criado, como instrumento, y se está convirtiendo en el auténtico amo. Sí señor. ¿Cómo continuará? Las opciones me aterran, aunque yo soy muy miedoso.
EliminarUn abrazo, Carles
¡Hola, Pepe! Y por eso un servidor no tiene teléfono móvil, ja, ja, ja... Me encantó este villano, digital y virtual pero muy real. Un aparatejo que como un niño caprichoso exige la atención permanente con sus pitiditos, sus mensajes pendientes y su permanente necesidad de actividad. A ver si llega el día en el que se establezca un apagado automático a las tres o cuatro horas de uso. Estupendo micro! Un abrazo!
ResponderEliminarEse apagado debería ser un decreto ley, porque la cosa se nos está yendo de las manos, aunque con ellas mantengamos el aparato. Pues en cierto modo, me parece una filosofía muy buena la tuya, no estar bajo el yugo de este aparatejo. Yo sigo apagándolo por la noche, y muchas veces hay días que no lo enciendo.
EliminarUn abrazo, David!
Los oscuros bordes de la tecnología que creemos dominar. Muy bueno.
ResponderEliminarMuchas gracias, Guille.
EliminarUn abrazo!
En todo momento pensando en el quién y resultó ser un qué. El humor, la fina ironía, la intriga... Me ha encantado, Pepe.
ResponderEliminarEl qué! Eso es, ya no es ni teléfono, simplemente móvil, dentro de poco, mi otro yo, ja, ja, ja.
EliminarMuchas gracias por pasar, Pilar.
Un abrazo!
¡Hola Pepe! El mayor tirano de la historia, el teléfono móvil, un elemento que se ha convertido en indispensable para la mayoría de nosotros. Desde el principio del micro mantienes atento al lector intentando averiguar quién está hablando. Me ha gustado mucho. Un saludo.
ResponderEliminarEso parece, porque el teléfono está apropiando de nuestras vidas y sin apiadarse de ello.
EliminarMuchas gracias por pasar, Rocío, me alegra que te haya gustado.
Un abrazo
Hola Pepe. Mucho me temo que el móvil es el principio de la tiranía tecnológica que puede esperarnos no en mucho tiempo. Aunque hay que reconocer que la era digital, todo sea dicho, nos abre una ventana a la información que puede ser usada mejor o peor, según el caso. Un relato ingenioso donde lo sutil prevalece, marca de la casa, y nos vas mostrando como el artefacto se vale de sus malas artes para influir en su dueño, ávido de atenciones como un niño caprichoso. Al final creo entrever una crítica no solo a la excesiva dependencia de la tecnología, sino a como determinadas fuerzas la aprovechan para crear una realidad paralela en nuestras mentes a base de bombardearnos con informaciones falsas. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Jorge, el otro día leí que seis de cada siete noticias que nos llegan son falsas. Creadas para mantenernos enganchados al aparato. Todo eso de la venta de datos personales queda en segundo plano, lo que prima es nuestra atención. Puede que tengas razón, la era digital es una herramienta fantástica, pero puede que haya evolucionado más que nosotros.
EliminarMuchas gracias por pasar, por tus detallados comentarios y elogios
Un abrazo!
Hola Pepe, que bueno un móvil reí indicando un poco de atención a su dueño, no te creas algunas veces los mismos móviles suelen vengarse con cosas como estas o cosas peores, jajajaj.
ResponderEliminarUn micro muy original y divertido, besos de flor.
Jajaja, te creo, los móviles son vengativos y unos canallas.
EliminarUn abrazo,Flor.
Pepe, sin duda , los auténticos villanos del siglo. Un puñetero movil te tritura el cerebro mejor que cualquier ameba. El tema es que nadie quiere darse cuenta y al capital cuanto mas venda, mejor. Pero tendremos consecuencias en el futuro. Ya paro, que me enervo, jajaja.
ResponderEliminarUn abrazo.
No te enerves, simplemente, apaga el movil jajajaja. La verdad es que es para asustarse, ojalá nos equivoquemos.
EliminarUn abrazo, Pedro.
Buenos días Pepe.
ResponderEliminarMientras leía, yo también me preguntaba. ¿Será un perro, un libro? Pues no, era el omnipresente móvil y eso, en estos tiempos, asusta. Porque estos aparatitos no sólo escuchan tus pensamientos, sino que se convierten en amos de tu vida.
¡Un relato muy logrado! Un villano que, por el momento, gana por goleada. Un abrazo.
La verdad es que a veces sí parece que te lean la mente. Asusta de pensar que sea así. Quizá ya sea tarde para nosotros, jajaja, me pongo enseguida distópico.
EliminarUn abrazo, Trujaman
Ja, ja, seguro que eso no falla… Muy hábil (a tu estilo) y profunda crítica a nuestro tirano favorito… Lo cierto es que da escalofríos que pasará en un futuro próximo si la gente sigue tan hipnotizada...
ResponderEliminar¡Un fuerte abrazo!
Esperemos que no, Maite, seguro que le pasa algo como lo que le pasó a la tele, una versión mejorada y con una IA superior, jajaja.
EliminarUn abrazo!
Ja, ja, ese es el verdadero antagonista, de todos y en cualquier ocasión. Ahora entiendo por qué le hacemos tanto caso, no se resigna a ser olvidado y se impone de todas las formas posibles. Genial el micro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es como un niño malcriado, Rosa, pero este programado para serlo.
EliminarMuchas gracias por pasar.
Un abrazo!
Hola Pepe!! Creo que has dado en el clavo, el móvil se está convirtiendo en nuestro mayor enemigo y las fake news son su dinamita. Muy buen relato, me ha gustado. Un abrazo.
ResponderEliminarUn cockel dificil de esquivar, Lola.
EliminarMuchas gracias por pasar y un fuerte abrazo!
Hola.. la verdad yo hace tiempo que descubrí las malas intenciones de mi móvil y su misión de destruirme poco a poco... Y ahora solo me lo confirmas... Ja ja.. excelente relato.. saludos
ResponderEliminarJajaja, de momento, podemos pararlo con un simple botón. De momento.
EliminarUn abrazo, Octavio
Cuánto mal nos está haciendo el móvil. Nos roba horas de sueño y de vida con la excusa de estar conectados y en comunicación con el vecino. Villano...
ResponderEliminarMuy buen trabajo. Una llamada de atención que seguramente caerá en saco roto, snif, snif.
Un abrazo enorme, compañero.
Bueno, cada vez hay más gente que está en contra, Bruno, esperemos que nos oigan.
EliminarUn fuerte abrazo, compañero
Genial, Pepe. Un amo tirano, tal cuál. Habrá que ponerlo en su sitio antes de que sea demasiado tarde.
ResponderEliminarUn abrazo.
Eso es, Carmen, nunca es tarde si la dicha es buena
EliminarUn abrazo!
Muy buen relato, escrito con tu habitual sentido del humor pero de los que te deja pensando hacia dónde vamos.
ResponderEliminarUn abrazo, Pepe.
Muchas gracias, Chema, veo que el pensamiento es más común de lo pensado.
EliminarUn abrazo!
Hola, Pepe!! me ha gustado mucho tu micro. Me gusta la crítica que encierra: esa dependencia que tenemos tantas personas de los móviles nos perjudica. Y es que al final los móviles no están a nuestro servicio sino al revés. Los móviles tienen tantas funciones y con el desarrollo de la inteligencia artificial, ¿quién puede saber lo que sucederá en el futuro? Con tu relato ofreces una clara respuesta. Enhorabuena y un abrazo!!
ResponderEliminarLos móviles liderarán la ofensiva a favor de los humanos, estoy seguro, porque ya nos están dominando, jajaja.
EliminarMuchas gracias, Cristina
Un abrazo, Cristina
EliminarYa lo has cabreado! Verás la que te viene. Buen relato
ResponderEliminarJajaja, ya ves, Valentín, habrán represalias.
EliminarUn abrazo!
EliminarGenial micro. Me encantó.
ResponderEliminarRelata muy bien el mal que nos hace la adicción al teléfono.
Un abrazo.
Muchas gracias, Cynthia.
EliminarUn abrazo!
Los celulares suelen tener aplicaciones, que suelen ser I.A.
ResponderEliminarPuede ser que tengan autoconsciencia y desarrollen cierta maldad.
O por lo menos, el deseo de tener la atención.
Saludos.
No sé, pero cada vez parece que tengan vida propia, o algo similar.
EliminarUn abrazo, Demiurgo!
Hola Pepe, un micro muy ruidoso a pesar de su silencio, ja, ja, me ha encantado, llegue a pensar en el reloj despertador, pero al final ¡Zas!, el maldito tirano del celular, un supervillano al que nosotros le hemos entregado llenos de ilusión nuestra vida, y que la destroza sin piedad alguna al crearnos esa adicción tan fatal. El mio lo mantengo lo más callado posible, no tengo redes ni uso whatsapp, así que lo ignoro mayormente, solo lo uso para llamadas y ver el correo de cuando en cuando.Genial el monólogo de este villano, buen relato reflexivo.
ResponderEliminarRecibe un abrazo y mis deseos de muchas alegrías en este mes.
Hola, Harolina. Pues ese, el despertador, también es un villano que se merece unos cuantos relatos, ja, ja. Pero no, tenemos al villano por excelencia, incluso le ha robado el trabajo al despertador, reloj y lo que queda. Yo también suelo apagarlo a veces, aunque cada vez la dependencia es mayor.
EliminarMuchas gracias por pasar, Harolina, que tengas muchas alegrías este mes también
Un abrazo
Hola Pepe, muy buen relato, que original, jaja, me ha encantado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Dakota.
EliminarUn abrazo!
Hola, Pepe. Yo pensando todo el rato que hablaba solo y le estaba dando palique al móvil. 😂😂🖐🏼
ResponderEliminarEso es casi lo mismo JM.
EliminarUn abrazo!
Tiene un gran contenido aquí, encuentro algo en la medicina herbaria bueno para compartir aquí con cualquier persona que padezca enfermedades como VIH, herpes, hepatitis, diabetes, cáncer de columna, cáncer de estómago, cáncer de vagina, cáncer de vulva,
ResponderEliminarCáncer de testículo, Enfermedades de taquicardia pulmonar, Cáncer de páncreas, Leucemia, Cáncer de hígado, Cáncer de garganta, Escoliosis, Tumor cerebral, Fibromialgia, Toxicidad por fluoroquinolonas Cáncer de vejiga, Cáncer de cerebro, VIH, Herpes, Cáncer de esófago, Cáncer de vesícula biliar, Enfermedad trofoblástica gestacional, Cáncer de cabeza y cuello ,Linfoma de Hodgkin
Cáncer intestinal,Cáncer de riñón,VPH,Cáncer de pulmón,Melanoma,Mesotelioma,Mieloma múltiple,Tumores neuroendocrinos
Síndrome Fibrodisplasia Osificante Progreso esclerosis, enfermedad de Alzheimer, Diarrea Crónica, Enfermedad de Lyme Crónica, Lupus también. Puedo hacerlo, fui a un programa en África occidental sobre moda en otro lado, era VIH positivo. Caminé por un pueblo cercano para ver el horario de nuestro programa, luego encontré un letrero que decía Dr. Itua Herbal Center, luego les pregunté a mis colegas qué pasaba con este mismo hombre llamado Dr. Itua. Ella me dijo que él es un médico herbal y que puede curar todo. tipo de enfermedad caminé hacia él y le expliqué como soy un estrangulador por ahí me preparó medicina herbal y me dijo cómo beberla durante dos semanas, cuando llego a mi habitación de hotel le echo un vistazo entonces dice una oración antes de beberlo sin saber que después de dos semanas fui a hacerme la prueba y descubrí que era negativo Corrí hacia él para pagarle más pero se niega y dice que debería compartir sus obras para mí en todo el mundo para que las personas enfermas puedan ver también Estoy escribiendo mucho sobre él esta temporada, así es como me curé bebiendo la medicina herbal del Dr. Itua. Es un hombre cariñoso con un corazón piadoso. Bueno, todo lo que decidí pasó bien por mí y cómo vas a tratar este nuevo aspecto de tu vida. No tienes que sufrir solo, y está bien pedir ayuda. Tampoco tiene que ser un demonio constante, ya que conocerás tu cuerpo y a ti mismo de una manera mucho más profunda que la mayoría de las personas. Aproveche esto, ya que le ayudará a apreciar Africa Herbal Made.
Información de contacto del Dr. Itua.
Correo electrónico... drituaherbalcenter@gmail.com.
Número de Whatsapp....+2348149277967
Demasiado largo aburre en el camino
ResponderEliminarCreo que te equivocaste de relato, Mucha; es el de La caja el largo, este es un minuto de lectura, aunque, ¿dónde está la vara de medir el tiempo? Relativamente hablando, no existe; un minuto puede ser una vida y una vida un suspiro, un suspiro una eternidad y esta el mismo suplicio y paraíso al mismo tiempo, porque sobre el tiempo todo puede estar escrito, pero carecemos del mismo para poseerlo. ¡Viva el tiempo! Aprovéchalo, pues.
EliminarAbrazos!
Los dioses convencionales han sido desterrados por la tecnología y nos hemos convertido en súbditos alienados de ella. Los móviles son una buena muestra.
ResponderEliminarA mí me da pavor que se me rompa el móvil o, lo que es peor, el portátil, por la cantidad de cosas que no sé hacer ya sin ellos. Sin duda, son nuestros nuevos dioses nos tienen en un puño y es mejor no cabrearlos.
Un saludo.
P.D. ¿Has cabreado tú al tuyo? Lo digo por el comentario que te han dejado justo antes del mío. Huy, huy, huy...
La verdad es que son herramientas fabulosas, Kirke, pero la dependencia a ellos los ha convertido en deidades, como dices, jajaj, esperemos que estas creencias pierdan pronto la credibilidad.
EliminarSí, hay comentarios que me ponen los pelos de punta, otros que ponen de pelo las puntas, je, je.
Un abrazo